Hace un tiempo, comenzaron a acumularse en nuestra vidriera un montón de peces. Eran muchos, muchos, cada vez más y ya estaban un poquito apretados.
Un buen día decidieron que era hora de partir y nos pidieron ayuda. Como son unos peces muy agradecidos y les gustó mucho Kalén, decidieron salir a contar historias kalenas por ahí.
Salimos una tarde ventosa, las hojas danzaban locas en los árboles y alguna que otra se dejaba llevar. Nuestros peces quedaron encantados y muchos quedaron bailando con las hojas.
Otros prefirieron agarrarse de troncos gruesos, para quedar escondidos del viento…
También los hubo más curiosos, que prefirieron abrazarse a una fina columna para así poder ver los autos que pasaban.
A lo lejos se ve el equipo kaleno. Agradecemos especialmente a Antonio, por habernos ayudado a liberar nuestros peces y a Felipe, que se portó de maravilla :)
Intervención Urbana!! Conozco a esos activistas!
ResponderEliminarMuy bueno.
V
¡Gracias! Un día que estés por acá podés unirte al grupo ;)
EliminarKalenas, amigas, siempre alegrando el día de la gente y dándoles qué hablar :). Hermosa intervención de mares y peces. Abrazos desde la costa fría.
ResponderEliminarAbrazos calentitos, amiga Pimientita :)
EliminarMe encantó. Excelente idea.
ResponderEliminarGracias :)
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