Pero eso no es todo. Estos animales pueden transformarse en otros más raros y con nombres graciosos. Así es que nos encontramos con el rarro, el patón…
¿el o la letuga?
¿Y qué me dicen del pedrilo?
Y así podríamos seguir armando nuevos y curiosos animales e imaginando…¿cuál será el alimento favorito del patón, el queso o los peces? ¿correrá muy rápido la letuga? ¿será el rarro un buen guardián? Cuántas preguntas, cuántos misterios para develar con este juego.
Y si te gusta mucho y querés tenerlo siempre a la vista, está la opción del animaloco imantado que podés pegar en la heladera, una puerta metálica, tu pizarra imantada, una lata…
Este es más pequeños y también es una buena opción para llevar siempre contigo, por si te aburres cuando hay que esperar en el médico o cuando acompañamos a los papis a hacer los mandados.
Me gustó este puzzle muy original!
ResponderEliminarSu emprendimiento está genial me parece excelente, diferente a todo lo visto por aca.
Un abrazo!
Noel
Muchas gracias Noel. Ojalá puedas pasar a visitarnos.
ResponderEliminarSaludos.